Satine's world

Un lugar para expresarse, para escribir lo que piensas y pensar mientras escribes, para conocerme mejor y que me conozcáis mejor.

jueves, septiembre 28, 2006

Amour, amour, amour...

Hace unos días, comentábamos lo complicado, por no decir imposible, que es definir el amor, un sentimiento realmente inexpresable en toda su magnitud, pese a ser el que más poemas, novelas, canciones, etcétera, ha inspirado. No voy a hacer mención a las canciones, que ya de por sí tienen un lugar destacado en este blog; ni tampoco a las novelas, puesto que son textos demasiado inabarcables, en su mayoría, para un espacio como éste. Hoy lo que quiero es recoger algunas frases que han tratado, con más o menos acierto, de definir, de reflejar qué es este sentimiento y cómo identificarlo. Espero que os gusten y que aportéis alguna más:

Uno está enamorado cuando se da cuenta de que otra persona es única (Jorge Luis Borges)
El amor es: el dolor de vivir lejos del ser amado (Anónimo)
Amar no es mirarse el uno al otro; es mirar juntos en la misma dirección (Antoine de Saint-Exupery)
La mayor declaración de amor es la que no se hace; el hombre que siente mucho, habla poco (Platón)
Te amo para amarte y no para ser amado, puesto que nada me place tanto como verte a ti feliz (George Sand)
En un beso, sabrás todo lo que he callado (Pablo Neruda)
El amor es una amistad con momentos eróticos (Antonio Gala)
Es una locura amar, a menos de que se ame con locura (Proverbio latino)
No olvides nunca que el primer beso no se da con la boca, sino con los ojos (O. K. Bernhardt)
No hay disfraz que pueda largo tiempo ocultar el amor donde lo hay, ni fingirlo donde no lo hay (François de la Rochefoucauld)
Las cartas de amor se escriben empezando sin saber lo que se va a decir, y se terminan sin saber lo que se ha dicho (J. J. Rousseau)
Hay que escuchar a la cabeza, pero dejar hablar al corazón (Marguerite Yourcenar)
Cuando se es amado, no se duda de nada. Cuando se ama se duda de todo (Colette)
El verdadero paraíso no esta en el cielo, sino en la boca de la mujer amada (Théophile Gautier)
Puede uno amar sin ser feliz; puede uno ser feliz sin amar; pero amar y ser feliz es algo prodigioso (Honoré de Balzac)
El verdadero amor no se conoce por lo que exige, sino por lo que ofrece (Jacinto Benavente)
La medida del amor es amar sin medida (San Agustín)
El que ha conocido sólo a su mujer y la ha amado, sabe más de mujeres que el que ha conocido mil (Leon Tolstoi)
El camino no es largo cuando amas a quien vas a visitar (Anónimo)
El más difícil no es el primer beso sino el último (Paul Géraldy)
Un mundo nace cuando dos se besan (Octavio Paz)
El amor, como ciego que es, impide a los amantes ver las divertidas tonterías que cometen (William Shakespeare)
Cuando se habla de estar enamorado como un loco se exagera; en general, se está enamorado como un tonto (Noel Clarasó)
El corazón tiene razones que la razón ignora (Pascal)
Si no recuerdas la más ligera locura en que el amor te hizo caer, no has amado (Shakespeare)
Amar a alguien es decirle: tú no morirás jamás (Gabriel Marcel)
El alma que hablar puede con los ojos también puede besar con la mirada (Gustavo Adolfo Bécquer)
Al amor lo pintan ciego y con alas. Ciego para no ver los obstáculos y con alas para salvarlos (J. Benavente)
El ruido de un beso no es tan retumbante como el de un cañón, pero su eco dura mucho más (Oliver Wendell Holmes)
Un amante apasionado ama hasta los defectos de la persona a quien ama (Molière)
El hombre que no ha amado apasionadamente ignora la mitad más hermosa de su vida (Stendhal)
Uno no se enamoró nunca, y ése fue su infierno. Otro, sí, y ésa fue su condena (Robert Burton)
El amor del hombre es algo aparte en su vida, mientras que el de la mujer es su existencia entera (Lord Byron)
Amor se llama el juego en el que un par de ciegos juegan a hacerse daño (Joaquín Sabina)
El día que tú no ardas de amor, muchos morirán de frío (François Mauriac)
Ama un solo día y el mundo habrá cambiado (Robert Browning)
Enamorarse es sentirse encantado por algo, y algo sólo puede encantar si es o parece ser perfección (José Ortega y Gasset)
Quien en zarzas y amores se metiere, entrará cuando quiera, mas no saldrá cuando quisiere (Plutarco)
El amor es un crimen que no puede realizarse sin cómplice (Charles Baudelaire)
El amor es como el fuego; suelen ver antes el humo los que están fuera, que las llamas los que están dentro (Jacinto Benavente)
Es duro, es doloroso, no ser amado cuando se ama todavía, pero es bastante más duro ser todavía amado cuando ya no se ama (Georges Courteline)
El amor es la más noble flaqueza del espíritu (John Dryden)
El más poderoso hechizo para ser amado es amar (Baltasar Gracián)

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viernes, septiembre 15, 2006

¿Qué es el amor?

No me digáis que no os habéis hecho esta pregunta alguna vez, que no habéis buscado una definición, una manera de explicarlo, de comprobar qué es lo que estáis sintiendo... Supongo que todos lo hemos hecho en algún momento de nuestra vida.

El otro día, mientras revisaba los nuevos libros de texto de mi hermano, encontré un fragmento de "Cartas literarias a una mujer", de Gustavo Adolfo Bécquer, para mí el mejor poeta español de todos los tiempos. Lástima que su producción sea tan exigua. Creo que expresa a la perfección la respuesta al interrogante:

"¿Qué es el amor? Llenos están los libros de definiciones sobre este punto. Las hay en griego y en árabe, en chino y en latín, en copto y en ruso... ¿Qué sé yo? En todas las lenguas, muertas o vivas, sabias o ignorantes, que se conocen. Yo he leído algunas y me he hecho traducir otras. Después de conocerlas casi todas, he puesto la mano sobre mi corazón, he consultado mis sentimientos y no he podido menos de repetir con Hamlet: '¡Palabras, palabras, palabras...!' ¿Quieres saber qué es el amor? Recógete dentro de ti misma, y si es verdad que lo abrigas en tu alma, siéntelo y lo comprenderás, pero no me lo preguntes".

Lo que sí tengo claro es que voy a localizar un ejemplar de la obra y leer el resto. Seguro que merece la pena. Ya os contaré.

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sábado, septiembre 02, 2006

Irreversible

Permitidme que os cuente una pequeña historia sobre la verdad y las palabras, sobre la consciencia y la inconsciencia y la línea que separa a ambas.

- "Algunas cosas me gustaria leerlas u oírlas con todas y cada una de sus letras y no tener que leerlas entre líneas", dijo él.
- "¿Qué quieres oír?", preguntó ella.
- "Sólo lo que tengas que contarme", respondió.

Es ahí donde se presenta el dilema. Responder sin ambages o evadir la verdadera respuesta. Lo segundo, garantiza permanecer a salvo, refugiarse en el miedo. Lo primero, arriesgar, jugar fuerte. ¿Por qué? Porque cuando la verdad sale a la luz, ya no hay forma de ignorarla, de disimular, de actuar como si no hubiera sido revelada. Para lo bueno y para lo malo.

Sean cuales sean las circunstancias, esta situación aparecerá mil veces a lo largo de nuestras vidas: en el amor, en la amistad, en el trabajo, en la familia, etcétera. Es precisamente en esos momentos en los que cada persona elige su camino, en los que la vida de todos y cada uno va tomando forma. Y, a diferencia de los libros de "Elige tu propia historia" que recordábamos ayer por la noche, no hay vuelta atrás. El camino elegido es irreversible.

Como dar un salto al vacío
o robar un pétalo a una flor.
Como entrar de vuelta al paraíso
o añadir un verso a esta canción.
Como hacer un surco en un vinilo
o pintar un trazo en un Van Gogh.
Mi corazón se ha vuelto irreversible,
desde el momento en que el destino lo marcó.

Viendo llover, nos quedamos dormidos.
Viendo llover, el cielo azul de un domingo.
Aquella noche soñé lo que luego escuché.
Y, desde entonces, ya sé que yo quiero contigo.

Como hablar rompiendo un secreto
o escribir mi firma en el papel.
Como ver que vuelve a ser invierno
y que los niños ya me tratan de usted.
Como abrir mi hucha de dinero
o decidir ser 3 en vez de 2
Mi corazón se ha vuelto irreversible,
desde el momento en que el destino lo marcó.

Viendo llover, nos quedamos dormidos.
Viendo llover, el cielo azul de un domingo.
Aquella noche soñé lo que luego escuché.
Y desde entonces ya sé que yo quiero contigo.

Viendo llover, nos quedamos dormidos.
Viendo llover, el cielo azul de un domingo.
Aquella noche soñé lo que luego escuché.
Y desde entonces ya sé que yo quiero contigo.

Viendo llover, viendo llover, sé que quiero contigo...

Cómo no, otra canción de La Oreja de Van Gogh. Si es que me encanta...

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